A pesar de la cruenta persecución política de esas décadas nunca perdiste tu gran sentido del humor, tu amor por la poesía, por la literatura, tu calidad humana y de ser muy amoroso con todos.






Julio Vives Vázquez, un ser muy especial para todos los que hemos tenido el privilegio de conocerte y haber compartido contigo una pequeña porción de tu extraordinaria vida. Quiero que sepas que cuando CLARIDAD me pidió esta colaboración, a la cual no me podía negar, intuí que era una asignación difícil, y lo ha sido, por lo que acudí inmediatamente a las fuentes de información primarias, tus más cercanos amigos. Déjame aclararte lo de la dificultad. Eres un hombre tan talentoso, con tantas experiencias de vida y tan excelente como escritor que temí (y aún temo) no lograr el objetivo de que los lectores te aquilaten como mereces. Pero aquí vamos.

Julio, no tienes idea de lo que significas para tus amigos, o tal vez lo sepas, pero te lo voy a repetir para beneficio de las presentes y futuras generaciones. Me dicen que en ti reencarnó un caballero “antiguo”, en el mejor sentido de la palabra. Hombre de detalles, cortés, atento, (no sólo con las damas, con los varones por igual) culto, de pocas palabras, enemigo de las discusiones estériles y sobre todo, gran amigo.

La rectitud, la disciplina y la puntualidad son tus principales características, nunca llegabas tarde a una reunión, por el contrario, siempre te adelantabas por 10 o 15 minutos. También te molestaba cuando ocurría lo contrario, cuando te hacían esperar sin una razón válida. Esa rectitud, tu seriedad y tu caminar erguido hacían que se te mirara con un poco de aprensión, como si fueras distante, hasta que se te conocía y se descubría el gran ser humano que alberga en ti.

Durante las entrevistas que realicé hubo un denominador común. Cuando les pedía a tus amigos y amigas (compañeros y compañeras) que te describieran miraban hacia arriba como buscando cómo articular contestaciones coherentes cuando las emociones los traicionaban. Querían decir tanto que repetían adjetivo tras adjetivo y sus rostros reflejaban el gran cariño y admiración que sienten por ti.

Entre otras cosas me dijeron que siempre fuiste uno de los más destacados dirigentes del Movimiento Pro Independencia, década del 60, y del Partido Socialista Puertorriqueño, década del 70, aunque tu humildad era sello indeleble y evitabas  todo protagonismo. Realizaste las tareas políticas más diversas, desde las más insignificantes hasta las de mayor envergadura y nunca hubo un no.

En un momento viajaste en el mismo avión junto a Raúl Castro a un Congreso que se realizó en Africa. Te encontrabas de visita en Cuba cuando te llegó la asignación desde Puerto Rico de continuar viaje a ese Congreso al que también Cuba acudiría. De ahí surgió que el propio Raúl te invitara a que te unieras al grupo que saldría de la hermana República.

La lucha por la independencia de Puerto Rico siempre ha sido tu razón de ser por lo que durante las décadas de tu activismo político tus sacrificios fueron enormes. Estoy segura de que tantos viajes al exterior trastocaron mucho tu vida personal, tenías familia que atender, y prácticamente le diste la vuelta al mundo asistiendo a cuanto evento internacional surgía, incluyendo a la República Popular China y a Corea del Norte. La denuncia del caso colonial de Puerto Rico era tu prioridad.

A pesar de la cruenta persecución política de esas décadas nunca perdiste tu gran sentido del humor, tu amor por la poesía, por la literatura, tu calidad humana y de ser muy amoroso con todos. Me dicen tus amigos que mientras más te conocían más se maravillaban de tu amplia cultura, tu calidad humana y tus profundos conocimientos sobre todas las manifestaciones del ser humano en la música, el arte, la literatura, la historia universal. También te disfrutas la agricultura y eres precursor en la creación de huertos caseros, que además de alimentarte es la terapia que mayor satisfacción te brinda.

En las reuniones políticas detestabas las controversias y discusiones estériles, no las rehuías pero eras preciso y firme, ibas a los asuntos sin rodeos y sin estridencia.

Te graduaste de ingeniero en Nueva York y coincidiste en la misma universidad y los mismos años con Collin Powell (Secretario de Estado, bajo Bush, hijo) lo que recuerdas para bromear, luego te fuiste a trabajar a Colombia.

A tu regreso ingresaste a la facultad de Derecho de la UPR de donde te graduaste. Para esos años, 1970, compartiste bufete con Juan Mari Brás y Pedro Baigés Chapel.

Cuando coincidimos trabajando en la Corporación de Servicios Legales de Puerto Rico (SLPR) fuiste parte de la Junta Editorial del periódico El Cucubano que yo editaba. Siempre venías con una agenda preparada con los puntos a discutirse. No sabes lo feliz que me hacías y cómo me facilitabas el trabajo. Era la mejor prueba de lo que ahora me dicen nuestros amigos en común: organizado y disciplinado. Cuando decidiste retirarte de SLPR tu supervisora me llamó para que te convenciera de que te necesitaba en el Programa. ¡Así de valioso eras! Aunque cumplí con la encomienda le enviaste tu cariño y agradecimiento, pero no cediste, ya la decisión estaba tomada.

No puedo dejar fuera los años de abogado en tu querido Comerío donde corriste de niño por sus calles y que con tanto cariño recuerdas.

Alida Millán, la directora del suplemento cultural, En Rojo, de CLARIDAD, me pidió este artículo porque estás celebrando tu novena década de vida. Ya quisiéramos todos alcanzar esa edad con tu lucidez mental, y echándole ganas a la vida, porque disfrutas vivir, por eso has hecho tantas cosas, por eso has sembrado tanto, en sentido figurado y real. Sólo aspiramos a que en nuestro querido país siga naciendo, o comience a nacer, gente como tú, con tus valores y compromisos, con todos los atributos aquí descritos.

Algún día se conocerá tu historia, esperamos que seas tú el autor. Uno de tus amigos del alma me dijo, tú sabes quién es, que compartió contigo cuando cumpliste los 75 y se alegra sobremanera de poder estar ahora en tus noventa para verte, abrazarte y repetirte cuán importante has sido para este país. Eso haremos muchos aunque sea en la distancia.

* Ante el fallecimiento del insigne patriota y dirigente independentista, reproducimos este artículo que publicó originalmente el 29 de octubre de 2012, en En Rojo.