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Ante la ONU reclamo por Santiago Mari Pesquera PDF Imprimir Correo
Escrito por Rosi Mari Pesquera   
Miércoles, 23 de Marzo de 2016 12:27

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La American Civil Liberties Union (ACLU) está gestionando que la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas acoja el caso de Santiago (Chagui) Mari Pesquera como parte de sus trabajos, “para que prevalezca la justicia, la verdad, la reparación y la no recurrencia de crímenes políticos cometidos por el estado”.

 

 



La relatoría, dirigida por el colombiano Pablo de Greiff, investiga casos de ejecuciones y desapariciones. Entre otras investigaciones, ha intervenido en el caso de los nietos y nietas de las abuelas de la Plaza de Mayo de Argentina.

A continuación la carta que enviara Rosa M. Mari Pesquera, hermana de Santiago, al encargado por la ACLU de llevar el caso a Ginebra, Jamil Dakwar. En ella se resumen los acontecimientos de largos años de encubrimiento y negativas por parte del FBI y otras autoridades a desclasificar los documentos que contienen información sobre los responsables de este crimen, cuyo 40 aniversario se cumple el próximo jueves 24 de marzo de 2016. (Este día la familia Mari Pesquera convoca a un acto de recordación en el Cementerio del Viejo San Juan a las 11am).

Jamil Dakwar
Director of Human Rights
American Civil Liberties Union
New York, New York

Mi nombre es Rosa Mercedes Mari Pesquera. Le escribo en nombre de la familia; padre (QEPD), madre, hermano y hermanas de Santiago Mari Pesquera.

Santiago (Chagui) Mari Pesquera fue el hijo mayor de Juan Mari Brás y Paquita Pesquera Cantellops. Nació el 26 de agosto de 1952 y murió asesinado el 24 de marzo de 1976.

Juan Mari Brás, abogado de profesión fue dirigente político desde su juventud y dedicado a la lucha por independizar a Puerto Rico de los Estados Unidos. Al momento de la muerte de su hijo, en marzo de 1976, Mari Brás dirigía el Partido Socialista Puertorriqueño, un movimiento vigoroso y creciente, abiertamente revolucionario, que había logrado una fuerza e influencia en el movimiento obrero, las luchas comunales y se abría paso en las contiendas electorales del país.

Paquita Pesquera, quien era profesora universitaria, fue militante desde sus años estudiantiles y participaba de forma prominente en el mismo partido. Al momento de la muerte de su hijo se encontraba enseñado en una universidad en Nueva York, y militando en la seccional del Partido Socialista Puertorriqueño en esa ciudad.

Chagui, apodo con el que se le conocía a Santiago Mari Pesquera, era un joven que a sus 23 años de edad despuntaba como un gran talento y con grandes capacidades. Políticamente Chagui se mantenía activo y participaba de las actividades del movimiento independentista y estudiantil. En la lucha contra el servicio militar obligatorio cuando la Guerra de Viet Nam, se negó a servir en el Ejército de los Estados Unidos por entender que no tenía por qué inscribirse en un ejército que no era el suyo, para pelear en esa guerra invasora. Se integró activamente en la huelga estudiantil de la universidad de Puerto Rico en 1973. Siempre asistía a las actividades contra la explotación minera y la devastación ecológica y a las del 23 de septiembre en Lares para celebrar el Grito de Independencia de 1868.

Regresó de Oklahoma donde estudió aviación en enero de 1976, En febrero comenzó a trabajar. Llevaba varias semanas de piloto en una pequeña línea aérea de carga cuando lo asesinaron.

FBI dirige persecución y hostigamiento al independentismo


En ese momento en que el Partido Socialista Puertorriqueño estaba en crecimiento y desarrollo, se publicaba el diario Claridad, que circulaba en Puerto Rico y Estados Unidos y se celebraban multitudinarias concentraciones políticas por la independencia de Puerto Rico, el gobierno de Estados Unidos y el FBI usaban a la Policía de Puerto Rico en diversas formas de represión, hostigamiento y persecución contra los independentistas.. Esto incluía la práctica anticonstitucional de la Policía de Puerto Rico de reunir información de ciudadanos independentistas con el fin de entorpecer sus actividades ideológicas.  (Vea aquí las carpetas de Juan Mari Brás)

Mi padre era una figura prominente del movimiento y él y nuestra familia fuimos objeto de múltiples amenazas y atentados. Los agentes del FBI rondaban la casa y el vecindario, preguntaban a los vecinos por nosotros y seguían a mi padre donde quiera que iba.

Una vez colocaron una bomba debajo del carro de mi madre que explotó y dejó el carro inservible. Casualmente fue mi hermano Chagui quien vio el carro que paró frente al de mi mamá, abrió la puerta, la cerró y aceleró alejándose rápidamente y al minuto explotó la bomba que levantó a Chagui de donde estaba sentado, rompió varios cristales de las ventanas de la casa y desbarató el carro. Chagui le dio a la policía la descripción exacta del carro que vio detenerse, la hora, etc. y esa investigación nunca llevó a que se acusara a nadie.

Por todos estos antecedentes y otros más que no tenemos espacio para exponer aquí, desde el momento mismo de la muerte de Chagui, supimos que este era un asesinato político y que el FBI, que tanto nos espiaba, tenía que estar involucrado.

El 26 de marzo de 1976, dos días después del asesinato la Policía de Puerto Rico le pidió al FBI, formalmente en una comunicación escrita, que todos los documentos, archivos e información que esa agencia le enviara al FBI sobre este caso quedaran explícitamente fuera del “Freedom of Information Act” y que cualquier agencia que recibiera la información se considerara obligada por este pedido. El dato lo obtuvimos de uno de los documentos del FBI que fue pedido a través del “Freedom of Information Act” por mi padre y refleja que toda la información específica del caso que fue intercambiada de ahí en adelante ha sido ocultada con toda premeditación y alevosía, tanto por la Policía de Puerto Rico, como por el FBI y la CIA . (Vea el Memo aquí)

El encubrimiento


Lo que siguió al asesinato fue el encubrimiento del caso. Muchas movidas y manipulaciones fueron hechas por policías, autoridades del Departamento de Justicia y otras ramas del gobierno con el propósito de aparentar una coartada que ya estaba planificada a la hora del asesinato. La coartada era utilizar a un joven, vecino nuestro y enfermo mental, para aparentar que él y sólo él, había matado a Chagui. De esa forma habría un acusado que se enjuiciaría y quedaría el caso resuelto.

A Henry Coira lo arrestaron. El agente que iba llevando la voz cantante en el arresto fue Alejo Maldonado que unos años más tarde fue convicto por un crimen. Cuando lo arrestaron Henry Coira se contradecía constantemente, a veces decía que había matado a Chagui y a veces decía que no. El primer fiscal asignado al caso, Emilio Duprey Tacoronte, declaró años más tarde que en el momento en que Henry Coira negaba que había asesinado a Chagui, Alejo Maldonado trajo a un hombre que dijo ser de la CIA. Este último entró en la habitación donde estaba Henry Coira, estuvo un rato solo con él y cuando salió, el acusado había cambiado su declaración. Esa persona fue el encargado de manipular sicológica y mentalmente a Coira para que mantuviese en su mente esquizofrénica, como una realidad vivida el esquema que había sido fabricado como coartada.

Henry Coira fue acusado pero no lo podían procesar porque era enfermo mental. Así consta en un certificado médico que se emitió el 8 de octubre de 1976 donde aparece con un diagnóstico de reacción esquizofrénica tipo paranoide crónico, mentalmente incompetente, firmado por el siquiatra José R. Vigoreaux. El acusado siguió preso pero como no era procesable no se le juzgó en los próximos años.

Mientras el acusado estaba preso sin procesar se releva de la investigación a los oficiales que habían sido los encargados originales del caso. Se releva al fiscal Duprey Tacoronte y se nombra en su lugar al fiscal Salixto Medina. Este último trabajaba coordinando con las autoridades federales el esclarecimiento de casos de corrupción policíaca.

En 1981 se cambió sorpresivamente el panel de siquiatras que evaluaba a Coira y el nuevo panel lo declaró procesable. Apenas diez días después de declararlo procesable, Coira se declaró culpable de asesinato en segundo grado en una vista judicial apresurada. A esta vista no llamaron a testificar a mi padre que le había pedido al tribunal que le permitiera declarar ya que tenía pruebas de que Coira no actuó solo. Tampoco llamaron a declarar a ninguno de los oficiales originales que estaban a cargo del caso, el fiscal Duprey y el oficial policíaco Ismael Rodríguez.

A mi padre se le notificó la fecha de la vista de sentencia. Cuando su representante legal, la Lcda. Ludmilia Rivera Burgos, llegó a la corte ese día le informaron que la vista se había efectuado el día anterior. Obviamente manipularon la fecha de las vistas ya que se anticipaba la oposición de nuestra familia a que se aceptara la rebaja del delito y, además, para impedir que cualquier pequeño incidente o la simple presencia de mi padre pudiera confundir la débil sicología del acusado y se dañara la coartada.

A Coira se le sentencia a cumplir una condena de 10 a 15 años por asesinato y de 1 a 3 años por uso ilegal de armas. Así el caso judicial quedó cerrado.

La reapertura del caso por el Departamento de Justicia de Puerto Rico


En 1983 el Senado de Puerto Rico investigó dos asesinatos que cometió la Policía de Puerto Rico. Durante la investigación un fiscal mencionó el caso de Santiago Mari Pesquera como uno que debiera ser reinvestigado porque había encubrimiento y, aunque se había declarado culpable a una persona no se había llegado a la verdad. En 1984 el Secretario de Justicia dio paso a una nueva investigación. En ese momento se le ofreció al Departamento de Justicia los detalles de la investigación que había hecho la familia y el Partido Socialista Puertorriqueño. Esta investigación vincula a dos hermanos cubanos de apellido Verdut cuyo automóvil fue visto, tanto en el lugar donde secuestraron a Chagui, como en el lugar donde dejaron el cadáver. Entre los documentos que obran en poder del Departamento de Justicia figura el traspaso de dueño de ese automóvil el día después del asesinato.

El informe de esa investigación concluye que Henry Coira no pudo haber actuado solo, según se desprende de las circunstancias del crimen.

Desde ese momento el caso permanece abierto en el Departamento de Justicia de Puerto Rico. En más de cinco ocasiones  funcionarios del Departamento de Justicia de Puerto Rico le han pedido a distintas agencias de gobierno federal de Estados Unidos que le entregue los documentos que tiene en su poder y la información que tienen sobre el asesinato de Santiago Mari Pesquera. El gobierno federal se ha negado consistentemente a ofrecer información.

El FBI sabía


En 2009 la Comisión por la Verdad y la Justicia, integrada por familiares y amigos de víctimas de asesinatos políticos en Puerto Rico,  encontró unos documentos desclasificados del FBI que confirman que en enero de 1976, dos meses antes del asesinato de Santiago Mari Pesquera, el FBI sabía que existía un complot para asesinar a Juan Mari Brás, padre de Chagui. En ese momento Mari Brás y su familia no fueron advertidos del complot ni de las amenazas contra sus vidas.

En otro informe del FBI sobre acciones realizadas por el Frente de Liberación Nacional de Cuba, el documento #105-21892 indica que, en enero de 1976, se enviaron rifles y mirillas telescópicas a Puerto Rico para asesinar al líder del Partido Socialista Puertorriqueño. (Vea el Memo desclasificado)

Son muchas las preguntas que nos hacemos a raíz del hallazgo de estos documentos. ¿Qué pasó entre enero y marzo de 1976? ¿Por qué en enero se sabía de un complot para asesinar a Mari Brás y dos meses después ejecutaron a su hijo? ¿Quién dio la orden para cambiar de víctima? ¿Qué relación hay entre ambas conspiraciones y qué papel jugó el FBI en cada una de ellas? ¿Por qué Reinol Rodríguez y Frank Castro conspiraban con la anuencia del FBI? ¿Por qué no se han encausado a los autores intelectuales de este crimen? Por otro lado, ¿por qué, si el FBI sabía de esa conspiración para asesinar a Mari Brás, nunca se lo hizo saber ni propuso un protocolo de seguridad para el entonces candidato a la gobernación? El hallazgo de estos documentos reitera lo que siempre hemos sostenido: que el FBI sirvió, cuando menos, de encubridor, si no incluso de co-autor de este crimen. Este fue un asesinato político con el fin de destruir a Juan Mari Brás, a su familia y al movimiento independentista.

A raíz de que miembros de la Comisión por la Verdad y la Justicia encontraran estos reveladores documentos, el periódico Claridad, representado por su director, Gervasio Morales Rodríguez, hizo una petición oficial al FBI y otras nueve agencias federales para que entregaran toda información y documentos relacionados a ambas conspiraciones y a las personas de Juan Mari Brás, Paquita Pesquera Cantellops y Santiago Mari Pesquera.

Las pocas agencias que contestaron lo hicieron para explicar que no estaban autorizadas a dar la información que le estaban solicitando.

El gobierno de Puerto Rico vuelve a pedir la información y el FBI vuelve a negarla

En 2015 el Jefe de la Policía de Puerto Rico le envió una carta al FBI donde le hace constar que a 38 años del crimen la Policía de Puerto Rico no ve ninguna razón que justifique que continue la excepción del Freedom of Information Act (FOIA) en el caso de asesinato de Santiago Mari Pesquera. Por tal razón solicita que se levante la prohibición de dar a conocer los documentos para tener acceso completo a la información y que se puedan clarificar las circunstancias que rodearon el histórico caso. El FBI volvió a negarse a dar información.

Este año se cumplen 40 años de ese crimen. Ante la negativa del gobierno de Estados Unidos  a destapar la información que con tanto celo han escondido por tanto años se hace necesario que se les reclame la verdad desde organismos internacionales.  Se trata de un crimen político que no puede quedar impune.

Apreciamos su interés en este asunto, cordialmente,

Rosa M. Mari Pesquera

PD: Para más información sobre el caso de Chagui visite este blog dedicado al caso.

 

Fuente: 80grados

 

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