La Asociación Mundial de Educación Especial (AMEE) otorgó este viernes en La Habana, Cuba, al líder revolucionario de esa nación, Fidel Castro, su premio Corazón Azul, por haber impulsado la creación hace 11 años de la primera escuela para niños autistas en la isla, según informó un medio local.
La ministra de Educación, Elsa Velázquez, "recibió en nombre del líder histórico de la revolución cubana este reconocimiento", que AMEE le confirió durante la jornada de clausura del I Encuentro Internacional de Autismo e Inclusión, señaló la agencia de Información Nacional (AIN).
La Asociación, una ONG con sede en Madrid otorgó el premio a Castro, de 86 años y alejado del poder desde 2006 por problemas de salud, por haber creado en 2002 la escuela Dora Alonso, la primera en la isla en tratar los Trastornos del Espectro Autista (TEA), añadió la fuente.
La escuela fue creada para atender específicamente a niños autistas menores de siete años, los cuales son atendidos de manera gratuita al igual que en los otros 369 centros que integran el sistema de educación especial en Cuba.
Otra escuela similar a la Dora Alonso fue creada en 2004 en Santiago de Cuba, 900 kilómetros al sureste de La Habana y segunda ciudad en importancia del país.
Antes de la creación de estas dos escuelas los niños autistas eran atendidos en centros especiales junto con los que padecían otros trastornos de conducta.
Desde que cedió el mando a su hermano Raúl Castro en 2006, Fidel se ha dedicado a escribir artículos de prensa y libros, así como a recibir personalidades en su residencia, en el oeste de La Habana.
Padres de menores con síndromes autistas recibieron reconocimiento
El Consejo Mundial de Académicos y Universitarios galardonó también a varios concurrentes a la cita, en particular a Alberto Docampo y Mercedes Carracedo, padres de Michel, un joven con TEA que trabaja en el archivo de la escuela Dora Alonso e hizo de locutor en la inauguración y clausura de este evento.
A propósito de los padres de menores con síndromes autísticos, la Doctora en Ciencias Pedagógicas Imilla Campo expresó en su conferencia de cierre que deben estar conscientes de que su hijo o hija, en un momento dado, puede retroceder en sus avances, pero que no por eso deben perder la esperanza.
El desconocimiento hace pensar a algunos, cuando ven las conductas caóticas de un autista, que son sus progenitores los que no lo educaron bien, por eso hay que lograr que la familia no dude de su capacidad como tutora y guía, y brindarles toda la instrucción y el apoyo posible, resaltó.
Orlando Terré, presidente de la AMEE, convocó a los presentes a participar en junio de 2014 del XII Encuentro Mundial “Educación Especial y Atención a la Diversidad”, del que Cuba fue escogida como sede por segunda ocasión debido a sus destacados resultados en estos aspectos.
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