La Habana, 17 sep (PL) Mantener la identidad cultural es el camino para alcanzar la autodeterminación de Puerto Rico, afirmó hoy en esta capital Olga Sanabria, dirigente del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano.

En un conversatorio efectuado en la sede de la Organización de Solidaridad de los Pueblos de África, Asia y América Latina, Sanabria llamó a cerrar filas para cambiar el status colonial, siempre teniendo en cuenta las tradiciones culturales y principios nacionalistas.

Subrayó que tal objetivo debe realizarse sin la supervisión del gobierno de Estados Unidos.

La luchadora independentista destacó la importancia de la lucha de los jóvenes por la libre autodeterminación, la cual choca con la realidad colonial, pero refuerza la conciencia nacionalista de las nuevas generaciones.

Hoy conocemos de una nueva oleada migratoria hacia Estado Unidos, pero estos jóvenes a diferencia de los que abandonaron el país en el pasado, están mejor preparados académicamente y son bilingües, por lo que, aseguró, continuarán la trayectoria de reclamar la soberanía de su pueblo.

Ellos viven en varias ciudades norteamericanas, pero mantienen sus raices a despecho de la discriminación racial y la marginalización, señaló.

Sanabria destacó el respaldo de Cuba en diferentes escenarios, en los cuales defiende el derecho inalienable de Puerto Rico de ser independiente.

A nosotros los independistas nos queda en esta coyuntura política continuar la batalla, pero con madurez y sin dogmatismos, indicó la líder boricua.

Al referirse a los prisioneros políticos de su país en cárceles estadounidenses, Sanabria puntualizó que en Puerto Rico ya existe una gran sensibilidad por la injusticia que se comete con esas personas.

Ninguno es criminal, simplemente defensores de sus principios nacionalistas, expresó.

Precisó que no se trata de falta de apoyo internacional, sino de voluntad política del gobierno del presidente norteamericano, Barack Obama, para liberarlos.

En el mismo caso -añadió- se encuentran los antiterroristas cubanos presos en el país norteño desde 1998.

Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero junto a René González y Fernando González (conocidos internacionalmente como los Cinco), fueron arrestados por las autoridades norteamericanas por prevenir acciones violentas que desde territorio estadounidense impulsaban contra Cuba grupos terroristas. De ellos, sólo René y Fernando regresaron a Cuba tras completar íntegramente sus respectivas condenas, mientras que los tres restantes cumplen largas penas, pese a la campaña internacional que pide por su liberación y pronto retorno a la isla.

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