Intervención del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de la República de Cuba, Raúl Castro Ruz, en la clausura de la VII Cumbre de la Asociación de Estados del Caribe.
Excelentísimos Señores Jefes de Estado y de Gobierno, y demás delegados, observadores e invitados;
Estimado Embajador Alfonso Múnera Cavadía, Secretario General de la AEC:
Enviamos nuestro mensaje de condolencias y solidaridad a la familia del gran campeón de boxeo Muhammad Ali, al pueblo de los Estados Unidos, en especial a la comunidad afroamericana, cuyos derechos siempre defendió, así como a toda la comunidad deportiva internacional. Nunca olvidaremos su caballerosidad y ética, su rechazo a la guerra y su defensa de la paz, su respeto y amistad con el compañero Fidel y con ese gran boxeador nacido en Cuba y caribeño que fue Teófilo Stevenson, cuyo padre nació en San Vicente y las Granadinas y nieto, por vía materna, de una sancristobaleña.
La Cumbre que hoy concluye demuestra la capacidad de nuestra región para dialogar y concertar posiciones sobre los problemas y desafíos comunes que enfrentamos, y para perseverar en la búsqueda de soluciones a los mismos, adaptadas a las condiciones, necesidades y prioridades del área.
Los documentos y decisiones adoptados dan fe de ello. Hemos encontrado el consenso necesario para pronunciarnos sobre temas sensibles, de interés común.
La recién acordada Declaración de La Habana reafirma la vigencia de los principios fundacionales de nuestra Asociación como organismo de consulta, concertación y cooperación, para adoptar posiciones comunes entre los Estados, Países y Territorios del Caribe y promover la integración, tal como está recogido en el Convenio Constitutivo.
Hemos aprobado acciones concretas en el marco del Plan de Acción para los próximos tres años, en una variedad de temas de alta prioridad para todos nosotros.
Pero nos queda mucho por hacer y tenemos grandes retos que enfrentar, como son las amenazas a la paz y la seguridad internacionales, los efectos de la crisis económica y financiera internacional, y las consecuencias del cambio climático.
El debate sostenido demuestra la necesidad y la capacidad de nuestra Asociación de tratar los temas esenciales de la región, lo que es imprescindible para continuar los avances en materia de integración y de cooperación, dado que estos dependen esencialmente de la voluntad política de los gobiernos y las prioridades comunes de desarrollo.
Hemos reafirmado la importancia de aplicar los postulados de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, firmada por los Jefes de Estado y de Gobierno en enero de 2014, en las relaciones entre nuestras naciones y con otras contrapartes y socios.
La paz y la estabilidad, la defensa de los intereses de nuestros pueblos y el ejercicio de la soberanía y la autodeterminación, sin injerencia externa, son elementos esenciales para avanzar hacia las metas de integración y cooperación que nos hemos trazado. Esta coyuntura nos obliga a preguntarnos cómo consolidar lo alcanzado y seguir adelante. Sabemos todos, por la experiencia de la década perdida, que una nueva oleada neoliberal, con el desmontaje de las políticas sociales inclusivas, el aumento de la pobreza y la desigualdad, la desregulación del mercado, la desprotección ambiental y la disminución del papel del Estado, nos impedirá cumplir los objetivos de integración regional y cooperación que nos hemos fijado.
Cuba continuará trabajando, desde la Presidencia del Consejo de Ministros de la Asociación, con el propósito de seguir fortaleciéndola y aunando voluntades para hacer frente a los desafíos colectivos.
Nuestra Asociación fue creada con el objetivo de unir a toda la familia caribeña, incluyendo a los territorios que forman parte de estados europeos. Reconocemos la contribución de todos ellos, así como de la República Francesa y los Países Bajos, en su condición de Miembros Asociados. Esperamos que lo sigan haciendo y que también se sume el resto de los territorios caribeños.
Agradecemos la participación y los aportes de las naciones y organizaciones Observadoras, cuyo número continúa incrementándose, como muestra del interés que suscita el Caribe en todo el mundo.
Deseo destacar, una vez más, el aporte del Embajador Alfonso Múnera Cavadía al fortalecimiento de la Secretaría y de la labor de la AEC en estos años. A partir del próximo mes de agosto, este esfuerzo será liderado por la Embajadora June Soomer, a quien nuevamente felicitamos por su elección y le reiteramos nuestro apoyo.
Igualmente agradecemos la presencia de todos ustedes en La Habana y su compromiso con el avance y la consolidación de la Asociación.
Muchas gracias.
Fuente: CubaDebate |